Una dama blanca, alta y delgada,
con la nariz larga y colorada;
mientras la nariz arde y crepita,
la dama se vuelve pequeñita.
Respuesta: La vela.
Tiene barbas y no es hombre,
tiene dientes y no come.
Bailo siempre derechito;
cuando me empiezo a cansar,
tiemblo y caigo quieto al suelo
y el niño que está jugando
me tiene que levantar.
Campo blanco,
flores negras,
un arado
y cinco yeguas.
Me sientes cuando estoy cerca
Me oyes pero no me ves
Y aunque seas deportista
No me alcanzas al correr.
Llevo pijama a diario
sin guardarlo en el armario.
Redonda soy como el mundo,
sin mí no puede haber Dios,
Papa y Cardenales sí,
pero Pontífices no.
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